miércoles, 24 de febrero de 2016

SIN MIEDO A NADA

¡Hola, amantes de la lectura! Hoy os traigo la reseña de la primera entrega de la serie Malditos Bastardos...

SIN MIEDO A NADA
Autora: Anna Casanovas
Fecha de publicación: 12/09/2013
Editorial: Esencia
Páginas: 320
Precio: 5,95€ (promoción)

Alejandro Cruz es el guitarrista del popular grupo de rock español Malditos Bastardos. Es un hombre misterioso, acostumbrado a conseguir cualquier cosa que se le antoje. Las drogas y el sexo han sido sus fieles compañeros durante años, hasta que sufre un accidente de coche y tiene que someterse a un tratamiento de desintoxicación. 
Alejandro acepta ingresar en una clínica sólo porque no quiere terminar en la cárcel. Sin embargo, las instalaciones son confortables y los profesionales muy agradables... Todos excepto Miranda Porter, la nutricionista. A pesar de que ambos se detestan desde el primer momento, entre ellos va tejiéndose una intensa relación que acabará convirtiéndose en algo llamado amor….
El desenfrenado deseo que los invade los arrastrará a límites desconocidos, y a pesar de que harán lo imposible por no entregar su corazón, será lo único que podrán hacer si quieren vivir sin miedo a nada.


Me encanta Anna Casanovas, mi autora nacional favorita. La portada me parece preciosa y muy sencilla y el título es muy sugerente. Con semejante combinación, me encontraba deseando leer esta novela y en cuanto la encontré en la librería, no pude evitar comprarla. Después de meses buscándola, al fin caía en mis manos...

Alejandro es famoso. Aparentemente, lo tiene todo. Pero ha sucumbido al lado oscuro de la fama y está perdiendo todo lo que le rodea por momentos. La única forma de salvar su puesto en la banda de música, su relación con su hermano, con sus amigos y, por supuesto, de salvarse a sí mismo, es ingresar en un centro en lugar de ir a prisión tras el altercado con el que empieza la novela.

Así, conoceremos un protagonista masculino que se cree el Rey del Mundo a la par que sabe que está acabado. Renacerá de sus cenizas, sobre todo gracias a la nutricionista, Miranda. Aunque eso no significa que todo vaya a ser fácil. Una vez fuera de la clínica tras unas semanas en ella, deberá enfrentarse a la vida de artista que llevaba antes y le costará un mundo no recaer, no dar la espalda a los sentimientos que Miranda despierta en él. Deberá aprender a confiar en sí mismo y en los demás para superar todos los baches que aún no sabe si dejó atrás...

Para eso tendrá la ayuda de Miranda. La protagonista ha tenido una vida dura y llena de altibajos que han puesto a prueba su amor por la vida, por su familia y por sí misma. Ahora ha conseguido dejar atrás todo el dolor, aunque a veces aún llama a su puerta. Es una protagonista muy humana, muy luchadora, que termina haciéndose amiga del cantante que con una canción le dio todo lo que necesitaba en sus horas más oscuras.

De esa amistad rápidamente nacerá el amor. Un amor que Miranda vivirá de forma secreta y espinosa, pues querer a un hombre que anda de aquí para allá, con influencias negativas por doquier y con una vida de lo más ajetreada, no es sencillo para nadie, y menos para alguien anónimo que tiene dos hermanos a su cargo y un montón de responsabilidades sobre los hombros y sobre el alma.

Como veis, los personajes principales no lo tendrán fácil, ni dentro ni fuera de la clínica, pero sólo si se atreven a no tener miedo a nada conseguirán estar juntos.

Por otro lado, tenemos grandes secundarios y estoy deseando leer más sobre Malditos Bastardos. Todos y cada uno de ellos aportan una pincelada necesaria para que la relación de Alejandro y Miranda avance, aunque sea a trompicones, aunque a veces amenace con hacerlos retroceder varios pasos.

Para seros sincera, me costó bastante engancharme al libro. Es el estilo de Casanovas, pero había algo que no me hacía conectar con Miranda o con Alejandro, hasta que pocos capítulos más tarde, me encontré con ganas de saber más y más, de leer más y más. Incluso estuve tentada de leer las últimas páginas, un vicio muy malo que no consigo quitarme de encima, aunque en esta ocasión logré contener a tiempo...

De Sin miedo a nada puedo destacar su originalidad y su humanidad, pues la vida no es todo color de rosa y hay sombras que acechan a todas las personas y que pocos autores, sobre todo en romántica, se atreven a hacer suyas. Además, la pluma de Anna Casanovas es inconfundible. Su ternura, su moderada y sentida pasión, ese amor tan delicado. Una combinación que enamora a quién la lee y que vuelve a estar presente en el libro. Y así estoy, mal acostumbrada a que todo lo que escribe me encandile...

Os recomiendo la historia de Alejandro y Miranda, me declaro fan cien por cien de este turbulento romance; creo que es un tipo de libro que no estamos acostumbrados a encontrar y que Anna Casanovas sabe llevar muy bien. 

¡Nos vemos prontito con la reseña de otra novela de esta autora!

*4,5 en realidad...*

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