UN BESO EN PARÍS

¡¡Hola lectores!! Hoy comienzo una trilogía romántica, pero cuyos libros son historias independientes. Su autora, Stephanie Perkins.

La Torre Eiffel, Amélie y un montón de reyes que se llaman Luis. Esto es todo lo que Anna conoce de Francia. Por eso, cuando sus padres le anuncian que pasará un año en un internado de París, la idea no acaba de convencerla.

Pero en la Ciudad del Amor conoce al chico idea: Étienne St. Clair. Es listo, encantador y muy guapo. El único problema es que también tiene novia. ¿Conseguirá Anna el ansiado beso de su Príncipe Azul?

Bueno, ¿os acordáis de mi amigo Kenzo, de Adicción Literaria? Sí, ese que no dejó de insistir e insistir hasta que leí Rubí y siguientes. Pues ahora no ha parado hasta que he leído la historia de Anna y St. Clair. Y bueno, me alegra que lo hiciera. ¡Es tan cuuuuqui este libro!

Os pongo en situación. Anna vive en Atlanta con su madre y su hermano pequeño. Sus padres están separados y él se dedica a escribir novelas malas que tienen muchísimo éxito. Debido a esto, ambos progenitores deciden enviar a su hija a la otra punta del mundo: un internado para americanos en París.

Anna no está muy contenta con esto. De hecho, no está nada contenta, sobre todo teniendo en cuenta que la única palabra en francés que conoce es ‘oui’. Además, ha dejado atrás a su hermano, a su mejor amiga, un trabajo que le gustaba y a Toph, un chico con el que empezaba a surgir algo. Así que, no. Muy contenta no está.

Pero pronto Anna conocerá a Meredith y a sus amigos, entre los que se encuentra el guapo y atractivo Étienne St. Clair. Este chico despertará en ella sentimientos contradictorios, que se verán afianzados por el hecho de que St. Clair tiene novia.

ME HA ENCANTADO. No puedo decir más. Nah, sí que digo más. ¡Es simplemente PERFECTO! Aunque no deja de ser una trama simple y bastante típica, el encanto del libro reside en los personajes y en la forma en los que la autora los presenta. Me han parecido tan reales que he pensado que en cualquier momento podría encontrarme una Anna o un St. Clair (un St. Clair please). La forma de pensar de Anna es me ha transmitido empatía y me ha permitido identificarme con ella. Con su pluma, la autora ha conseguido que la historia me llegara al alma.

Anna, como ya he dicho, es una protagonista que me ha gustado mucho. Madura para su edad, es responsable y buena chica, que adora el cine. Y, como todos, comete errores. Pero eso solo la hace más real. Se desvive por su hermanito, al que adora. Es un personaje con el que no puedes dejar de identificarte.

En cuanto a St. Clair… ¿Hola? ¿Hay alguno por ahí? ¡Awwwwww! ¡Es tan monooooo! Es imposible no enamorarse de este chico británico/americano/francés xD Es brillante, encantador, guapísimo pese a ser bajito… ¡Aissss! <3 Y él también tiene sus fallos, pero, repito, con ello la autora consigue que sea mucho más próximo al lector.

Y el final… maravilloso, preciós, beautiful, jolie, bello… bueno, me habéis entendido que no tengo más idiomas xD Ha sido el final perfecto para un libro perfecto. Un final de esos que consiguen que cierres el libro con una sonrisa. Un final de los que me encantan.

Y, bueno, ni que decir tiene que lo recomiendo. ¿Os vais a perder esta bonita historia?^^

¡¡Hasta otra!!