¡¡Hola lectores!! Hoy os traigo
la segunda parte de la trilogía “Desconexión”. Su autor, Neal Shusterman.
Gracias Connor, Lev y Risa, y a
las repercusiones de que su revuelta en la Cosechadora de Happy Jack, la
población ya no puede seguir mirando para otro lado. Tal vez la desconexión
sirva para librar a la sociedad de jóvenes problemáticos y, al mismo tiempo,
para surtirla de órganos muy necesarios para los trasplantes, pero su
inmoralidad ha saltado por fin a la palestra.
Connor no da abasto dirigiendo el
Cementerio, un refugio para los ASP, chicos que, como él, han huido de la
desconexión. Risa, paralizada de cintura para abajo como consecuencia del
atentado de la Cosechadora, teme resultar más una carga que una ayuda para él.
Y Lev se ve envuelto en un movimiento
clandestino que pretende rescatar diezmos, y en el cual se le venera como si
fuera un Dios.
Uno de ellos será traicionado.
Otro se escapará. Y el tercero se encontrará con el misterioso Cam, alguien que
no existe, y hará un sorprendente descubrimiento sobre lo que se esconde detrás
de la desconexión.
Bueno, mientras me leía este
libro me preguntaba cómo haría esta reseña porque es un libro tan… OH GOD. Tan
intenso… AAAAAAAH xDDD Con lo que me gustó el primero tenía miedo de que
hubiera bajado el ritmo pero NO. Se ha superado. Le dedico la reseña a Teresa, de Within
Books, por haber hecho la Lectura Conjunta.
En fin, a la historia. No ha
pasado mucho tiempo desde los últimos acontecimientos de Desconexión. Los momentos vividos en la Cosechadora de Happy Jack
han dejado huella pero lo bueno es que la Brigada Juvenil cree que el ASP de
Akron murió allí. Nadie sabe que Connor Lassiter está vivo y dirige el
Cementerio tal y como indicó el Almirante. Pero Connor se siente inseguro
estando a cargo de cientos de desconectables problemáticos. No sabe si será
capaz de hacer frente a tanto problema. Además, el brazo de Roland es para él
algo que quizá no pueda controlar del todo.
Luego está Risa. Desde su decisión
de no permitir que le cambiaran la columna vertebral por la de un desconectado,
vive en una silla de ruedas. Y se siente un lastre para Connor, que no parece
tener nunca tiempo para ella. Y dada su necesidad de sentirse útil acabará en
una situación que escapa a su control y conocerá a Cam, alguien bastante
peculiar. Prefiero que lo averigüéis vosotros solos. Pero él será uno de los
dilemas morales. Cuando yo pensaba que el autor no podía salir con nada más
heavy aparece Cam. Todo muy flipante.
Y tenemos a Lev. Se ha convertido
en el aplaudidor que no aplaudió. El ex diezmo que se rebeló contra su destino.
Y él es uno de los símbolos de la rebelión. Los que rescatan diezmos han
convertido su imagen en algo en lo que apoyarse para desprogramar a los diezmos,
para que dejen de pensar que la desconexión es lo correcto. Y funciona. Los
diezmos incluso le veneran. Pero Lev no se siente como un dios. Él quiere hacer
algo realmente útil. Y no tardará en presentársele la oportunidad.
Pero esto no es todo. Aparecerán
nuevos personajes para dar guerra. Del mencionado Cam no voy a decir nada,
aunque en el tercer capítulo os enteráis de qué va la cosa. Luego tenemos a
Miracolina (un nombre muy chachi ¿eh?), una diezmo que se parece mucho a Lev en
sus mejores días. Su sino es ser desconectada y hará lo que sea para cumplirlo.
Así que cuando la rescatan los rebeldes no se siente en absoluto agradecida.
¿Conseguirá Lev hacerla cambiar de opinión? La verdad es que ella te hace
entender mucho más el punto de vista de los diezmos. Aunque sigo sin estar de
acuerdo, por supuesto.
Y luego tenemos a Starkey. Sólo
os voy a decir que cada vez que salía me ponía mala. Es un niño colado por la
cigüeña y, como el no puede ser menos que el gran ASP de Akron, se escapa de
sus policías y termina en el Cementerio. Allí… bueno, mejor no os digo más. Me
cae muy muy muuuuuy mal.
Y bueno, el libro sigue estando
dividido en varias partes. Pero esta vez, cada parte parece centrarse en unos
personajes en concreto. Además, hay muchísimas más perspectivas por lo que ves
la misma escena en diferentes ángulos. Y eso otorga al libro mucha más riqueza.
Y la narración del autor es buenísima por lo que el libro se te pasa volando.
Pasan tantas cosas a la vez que no puedes despegar los ojos de él. GENIAL.
Y por otro lado, como su
predecesor, te invita a reflexionar sobre todo lo que pasa en el libro. Aunque
este lo hace mucho más. Yo no podía dejar de darle vueltas al asunto mientras
leía. Es muy muy increíble.
Por tanto, os invito a leeros la
trilogía. El tercero todavía no ha salido en España pero ya está en inglés. Yo
esperaré a que se publique aquí aunque estoy deseando leer cómo termina esta
historia.
¡¡Hasta otra!!
¡Hola, hola!
ResponderEliminarMe han encantado estos libros, sobre todo el segundo. Tengo muchísimas ganas de que se publique el tercero.
¡Gracias por la reseña, un beso!
Hola! tiene muy buena pinta tal vez tenga la oportunidad de leerlo un saludo :D
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