BENDECIDA POR LA SOMBRA

¡¡Hola lectores!! Os traigo la reseña del tercer libro de la saga Vampire Academy. Su autora, Richelle Mead.  SI NO HAS LEÍDO SANGRE AZUL, NO SIGAS. CONTIENE SPOILERS

Rose sabe que enamorarse de otro guardián está prohibido. Su mejor amiga, la última princesa Dragomir, siempre debe ser su prioridad. Desafortunadamente, cuando se trata del irresistible Dimitri Belikov, algunas reglas se dictan para ser rotas. Pero desde que asesinó por primera vez a un Strigoi, Rose ha dejado de sentirse bien. Algo oscuro ha comenzado a crecer en su mente y sombras fantasmales advierten que una terrible maldad está cada vez más cerca de las barreras de hierro de la academia. Además, el peor enemigo de Rose y Lissa, Victor Dashkov, podría quedar en libertad y los vampiros inmortales están cada vez más cerca, y buscan venganza por las vidas que Rose ha tomado. En una batalla que le destruirá el corazón, Rose tendrá que escoger entre la vida, el amor y las dos personas que más le importan... pero ¿significará esa elección que sólo uno de ellos podrá sobrevivir?

Terminé este libro ayer a las dos de la mañana y mi vacío era tan grande que ni me atreví a ponerle nota en GoodReads. He tardado muchísimo más que con los otros dos en leer este libro. Pero no porque fuera malo o aburrido (de hecho, es el mejor de los tres que he leído), si no porque buscando un fanart en Google me spoileé el final.

Tengo la costumbre de dibujar sobre los libros que leo y me gusta buscar fanarts, dibujos y esas cosas. No me había pasado con ningún otro libro (mis spoilers solían venir siempre de twitter) hasta el momento en el que vi algo que no tenía que ver. Y mi mente se bloqueó en una especie de mecanismo de defensa (creo yo). Pero ayer me dije que tenía que superarlo y seguir. Total, pese a saberlo, sufrí y lloré como loca. Porque es brutal este final.

Pero vamos a lo de antes. Al final del segundo libro nos quedamos con que Rose ha matado dos strigoi para salvar a Christian y Mia, pero no ha podido evitar que uno de ellos matara antes a Mason. Sintiéndose responsable y triste, Rose vuelve a la vida normal en la Academia St. Vlad, donde van a empezar las prácticas de campo. Los novicios tendrán que proteger a su moroi de ataques falsos de strigoi, y Rose está convencida de que tendrá que proteger a Lissa. Hasta que le asignan otro moroi y las separan.

Además, Rose comienza a ver cosas que no debería. Mason ha vuelto como fantasma e intenta decirle algo, pero la joven dhampir no tiene idea de qué le está avisando su amigo. ¿O quizá se está volviendo loca y alucina cosas?

De verdad os lo digo, yo estoy en la piel de Rose este libro y al final me vuelvo loca de verdad. Pero ella es increíblemente fuerte, y por algo es mi personaje favorito. En esta ocasión Rose tiene que soportar aún más cosas, y lo hará en silencio, como siempre lo ha hecho: para proteger a Lissa. Se comenzará a sentir irascible y saltará por nada, como si estuviera permanentemente llena de ira. Adrian será clave para explicar el por qué le pasa todo lo que le pasa. Pero, como siempre, Rose demuestra que puede salir adelante de lo que sea. La adoro.

En cuanto al resto de personajes, Lissa me cae aún peor si cabe (mira que yo creía que eso era difícil). Hay un momento del libro en el que la estrangulaba para que se callara, por su extraña habilidad para no ver, ni querer ver, más allá de sus narices. Christian me sigue encantando y, tengo que decir para gusto de mi amiga Laia, que Adrian ha mejorado mucho. Y ahora, que me ha enseñado otras facetas, me cae muy bien. 

Pero mi amor verdadero de esta saga sigue siendo Dimitri y siempre lo será <3 Me encanta la conexión que tiene con Rose, que van en ambos sentidos. Se entienden con solo mirarse y su nivel de entendimiento es tal que te das cuenta de que harían lo que fuera el uno por el otro sin pestañear. Y lo demuestran con creces, tanto él como ella.

El estilo de Richelle se mantiene, aunque me inclino a decir que ha mejorado y todo. El ritmo del libro es trepidante y no me da tiempo a recuperarme de una cosa cuando pasa otra. Una pluma genial y que te mantiene pegada al libro hasta que lo terminas. Las diferentes subtramas se relacionan con la trama principal hasta que se unen al final, dando explicaciones para todo lo que ocurre en las últimas páginas. 

Los escenarios también cambian. Además de la Academia, viajaremos a la Corte Real, donde la Reina Tatiana gobierna sobre todo y todos con mano de hierro. Me ha gustado ver otra parte de la vida vampira y cómo funciona su sistema de Gobierno. 

Y el final… Bueno, creo que ya he dicho lo suficiente antes. La última frase del libro es un auténtico rompe-almas.

Así que, en poder cogeré el cuarto, aunque tengo miedo de averiguar qué va a pasar. Eso sí, yo os sigo recomendando la saga. Este libro se ha ganado la máxima puntuación, a pesar de lo mal que lo he pasado.

¡¡Hasta otra!!